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EL CAPITAL
ERÓTICO
Por Horacio Krell*
El poder de
fascinar a los demás fue investigado por
la profesora Catherine Hakim, del departamento de Sociología de la Londres
School of Economics ¿Por qué los estudios sociológicos no lo advirtieron antes
como un activo similar al capital económico, cultural social o intelectual.
Según Hakim, para estudiar la sociedad y el mercado laboral es necesario incluir
el capital erótico, que debería considerarse como “el activo personal”.
Un retraso patriarcal ha tejido una ideología
moral que impide aprovechar el capital erótico. Las feministas entraron en el
juego y son las primeras en criticar los concursos de belleza.
El Capital Erótico es un atractivo construido a partir de una inversión
inteligente en la propia imagen, en como uno se mueve, habla y se comporta. Las
personas atractivas se destacan, llaman la atención, atraen y predisponen
positivamente. Los mensajes no verbales son una carta de presentación. La
primera impresión que damos. No hace falta abrir la boca para que nuestro
interlocutor sepa cómo somos. Los gestos hablan sin voz.
Barack Obama es una
persona inteligente y formada, pero el hecho de ser guapo y delgado, estar en
buena forma física y vestir bien lo ayudó a ser el primer hombre de raza negra
presidente de EEUU. Su mujer, Michelle, cumple con los mismos requisitos.
Las personas dotadas de atractivo físico y social
tienen ventajas en todos los frentes. Esta parte del capital humano se nutre de
una buena educación y sólida experiencia laboral. Esta
mezcla de belleza,
atractivo sexual, imagen y destreza social, hace que ciertos hombres y mujeres
sean atractivos para otros y en especial para los del sexo opuesto.
Los efectos de este
activo se palpan desde la infancia, pasa luego por mejores empleos y salarios y
llega hasta un trato inclinado a la indulgencia por los jurados en los juicios.
Puede
intercambiarse por otros capitales, como si fuese dinero. El capital erótico es
un don tan valioso y esquivo que se hasta se busca adquirir casándose con una
belleza, como mecanismo para transferir activos eróticos a futuras
generaciones. De forma darwiniana, una familia poderosa pero sin gracia, procura
incorporar los dones de encanto y belleza.
Hay plebeyas que
accedieron a la realeza. Grace Kelly, Lady Di, Máxima de Holanda, o Kate
Middleton al casarse con el príncipe William. Todas ellas poseen gran capital
erótico.
Linda pero tonta.
Lo bello suele ser sinónimo de tonto pero es lo contrario. La inteligencia se
distribuye equitativamente, pero el capital erótico facilita que su brillo
prospere.
La
necesidad sexual y diversión erótica de los hombres supera con mucho el interés
de las mujeres por el sexo. El desequilibrio eleva el valor del capital erótico
femenino y les confiere una ventaja, cuando lo advierten y lo hacen
valer.
Al ser
un activo escaso, se vuelve más valioso, el poder siempre deviene de la escasez.
Las feministas perjudican a la mujer fomentando su comportamiento irracional que
prefiere la ponderación de otros capitales como el cultural. El dilema feminista
es fijar opciones entre belleza o inteligencia y socava aquello que pretende
fortalecer: el verdadero poder femenino no prospera devaluando el capital
erótico, sino exhibiéndolo. Se asocia el capital erótico a la belleza, ventaja
de nacimiento como la altura o el color de los ojos. Pero capital erótico es un
activo adquirido, en donde la belleza es un componente no definitivo.
Belle
laide es una mujer fea que se vuelve atractiva gracias al acierto con que cuida
su imagen y estilo. Ponerse en forma, mejorar la postura, llevar colores y
formas favorecedoras, elegir un corte de pelo y ropa adecuados, son cambios que
pueden conformar un look completamente nuevo.
El
capital erótico surge de valorar y combinar atributos donde la personalidad, la
simpatía, la indumentaria, la seguridad al hablar y moverse, son iguales o más
importantes que la armonía del rostro. Señala la importancia de la actitud en
los resultados de la vida para cambiar la
cotización de los activos personales y otorgarle al capital erótico un sitial
estratégico y poderoso en el patrimonio, los créditos y los mejores contactos
sociales.
Bases del capital erótico.
La Belleza es un elemento central. El Atractivo sexual reside en
la forma de moverse, hablar y actuar. El Atractivo social es la gracia,
el encanto, el don de gentes, la facultad de caer bien y hacer que los demás
estén a gusto, con ganas de conocerte. La Vitalidad mezcla la buena
forma física, energía social y buen humor. La presentación social es el
modo de vestir, maquillajes, perfumes, las joyas y adornos, el peinado y
accesorios que reflejan el estatus social y el estilo. La Sexualidad es
la destreza y la energía sexual, la imaginación erótica, el espíritu lúdico y
como partenaire sexual. La Fertilidad es un elemento más del capital
erótico femenino.
La inteligencia, la cultura,
el sentido del humor y la bondad son también sexis. Debemos incorporar el
Capital Erótico como una competencia a
desarrollar, al nivel del liderazgo. ¿Cómo? Ya hay talleres
titulados: “Desarrolle su Capital
Erótico para obtener más ventas”.
En las redes se puede
gestionar de forma inteligente la imagen y por lo tanto el capital erótico.
Nadie es tan feo como su foto del DNI ni tan guapo como su avatar. Los que
tienen más capital erótico tienen más seguidores, amigos, contactos y en
definitiva, más influencia y mejor posicionamiento en las redes
Conciencia del capital
erótico. El
capital erótico sería una herramienta particularmente valiosa en algunas
actividades, como encontrar pareja, adquirir poder negociador en el interior de
la pareja, en el mercado laboral y en las relaciones de trabajo. Los
seres humanos sabemos buscar señales faciales y entender rápidamente su
significado. Podemos ser inexpertos en comunicación no verbal pero nuestro
cerebro automáticamente la descifra y hace juicios sobre los demás y construye
la confianza o la desconfianza. No podemos explicar por qué con sólo ver a
alguien nos formamos una imagen y le colgamos la etiqueta. Lo hacemos en
instantes y los demás lo hacen también con nosotros, por lo que es muy útil
conocer como mostramos nuestro capital erótico con el cuerpo y con los gestos.
Primero, la mirada. Cuando dos personas se miran a los ojos se le da una
base real a la comunicación. Enviamos y recibimos visualmente más mensajes que
de cualquier otra forma. Esquivar la mirada significa que escondemos algo. Una
persona deshonesta no devuelve la mirada. Mirar a los ojos sin intimidar es
esencial para lograr confianza. Y lo que veamos en los ojos del otro nos dará
muchas pistas sobre nuestro capital erótico.
Si mira arriba y a la izquierda está recordando; arriba
y a la derecha está fantaseando, abajo y a la derecha está recordando un
sentimiento. Una mirada que va de un lado a otro dirá que no está segura o se
pone a la defensiva buscando la puerta de salida, y unos ojos llorosos y
empañados dicen aquello para lo que no tenemos palabras.
El efecto cara feliz. Ocultar la mirada directa limita el potencial de
comunicación. La sonrisa es la más positiva de las expresiones emocionales, los
rostros felices se reconocen fácilmente produciendo el efecto cara feliz.
Mostrar una sonrisa genera una primera impresión positiva, si es genuina. Si no
lo es carecerá de simetría Las expresiones faciales acompañan lo que le decimos
y complementan el sentido de las frases.
Atendemos más a quienes gesticulan al hablar de forma activa porque generan
percepciones de energía y entusiasmo, mientras que otros generan una imagen fría
y racional. Pero los gestos deben enfatizar, matizar, complementar la
comunicación. Si son anárquicos y no tienen nada que ver con el mensaje,
provocan distracción o desconcierto.
Las piernas y la posición de los pies reflejan emociones. Son la parte del
cuerpo que menos atención consciente nos merece y, por eso, la que menos
manipulamos. Cruzados debajo de la silla indicarán una posición cerrada. Todas
estas pistas aparecen sin intercambio verbal.
Las ventajas que aporta el capital erótico pueden ser compensadas por las
diferencias en los otros tipos de capital (económico, intelectual, social), por
lo que se relacionan. Hay
un plano de igualdad entre hombres y mujeres, como nunca antes hasta ahora, pero
los hombres tienen desventajas, el hombre no se planteaba ser atractivo, el
ideal de belleza estaba puesto en las mujeres. Son diferentes enfoques, en otras
épocas y contextos. Incluso en el que ella
despliega sus
encantos para que un hombre la mantenga de por vida.
Una anécdota sobre
capital social:
Warren Buffet, el
segundo hombre más rico del mundo, donó gran parte de su fortuna a la fundación
de Bill Gates. Luego de pasarse toda su vida enriqueciéndose se desprendió de su
dinero según una teoría de la riqueza que no la inventó él, sino una amiga suya
que murió a los 104 años y que, luego de sobrevivir el holocausto, empezó de la
nada una tienda de muebles en Omaha que llegó a ser la más grande de la región.
Ella sobrevivió al holocausto gracias a amigos no judíos que la escondieron. De
ahí derivó que la gente más rica es la que más amigos tiene, capaces de
esconderla en caso de una situación similar. Es la que tiene más capital social.
Si uno quiere
evaluar su capital social debe hacer una lista de la gente que uno conoce y
pensar quien sería capaz de arriesgar la vida por uno. Según Warren Buffet esta
es la verdadera riqueza y es por eso pudo desprenderse de su dinero, fruto de su
trabajo durante toda su vida. Es porque igual se quedó con lo suficiente para
vivir más que cómodamente y porque se siente rico por sus amigos y familia y no
por su dinero. Aunque también dijo que extraña enormemente a su esposa (es
viudo).
Este un gran
ejemplo para los ricos de Europa y Latinoamérica, que dedican muy poco o nada de
lo que ganan a devolver a la sociedad lo que ella les dio. Él mismo lo dijo, el
capitalismo es un sistema en el que "winners take all" (los ganadores se llevan
todo). Es un sistema imperfecto y las donaciones son realmente retribuciones. El
capital social no es sólo para hacer negocios sino para devolverlo, de alguna
manera, a quienes nos ayudaron.
El capital
erótico, como todos los capitales, se debe orientar a una función social.
* El doctor Horacio Krell es
el CEO Ilvem. Dicta conferencias gratuitas sobre métodos para optimizar la
inteligencia. Su mail de contacto es
horaciokrell@ilvem.com
Los espero en el próximo boletín.

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